viernes, 27 de agosto de 2010


Mis estimados, queridos, seguidores, que no seremos muchos, pero creo que algo de machos tendremos, en el sentido de lo valiente, no en el sentido sexista, que sería una discusión perdida, porque si hay algo que he aprendido sin comprender es el sentido tan desagradable en que generalmente se tornan estas discusiones, para mi -hoy- lo importante es el profundo amor, respeto y comprensión (esto último a veces me cuesta conseguir, por ser muy intolerante o sentirme intolerado) que tengo y aprendido a tener hacia mi compañera, pocas veces se lo he dicho y muchas veces en un contexto de discusión o desentendimiento , que no tienen el mismo valor, pero también es la cobardía, esa doble cobardía de quizá no ser correspondido con el mismo entusiasmo y segundo la cobardía del "macho" que esas cosas no se dicen muy a menudo y menos porque no medie razón alguna. No se como reaccionaran otros pero trato de ser claro, así actuamos algunos hombres, seguro que muchos lo harán mejor, otros peor y bueno me imagino que hay para todos los gustos, espero estar situado en un buen ranking en el sentimiento -gusto- de ella. Por mi parte pretendo exigir menos, aunque las circunstancias a veces me obligan a ser tan implacablemente exigente, que me rompe el alma que esas veces tener que ser tan cruel por que esta enfermedad te obliga a ser un egoísta de mierda, un egocéntrico, cuando en realidad que por la propia enfermedad en el último lugar que puedes estar es en el centro de algo, excepto en el centro de tu propia impotencia, tu propia limitación y tu propio egoísmo.